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Amigarches fijos: El hetero casado, el millonario y mi chota a punto de explotar.

Mr. Brightside | Tiempo atrás conté sobre la aparición de dos individuos en mi ajetreada vida sexual: el hincha de River al que sometí a m...

Mr. Brightside | Tiempo atrás conté sobre la aparición de dos individuos en mi ajetreada vida sexual: el hincha de River al que sometí a mis más bajos instintos, y el hetero casado que debutó completamente en el sexo entre hombres conmigo (de ahora en más, "el tachero", tal su profesión). Ambos dos se volvieron garches fijos. Y de hecho, se auto asignaron un dia cada uno: el gallina me escribe religiosamente todos los sábados, y el tachero todos los domingos.
Es fijo: TODOS LOS SÁBADOS y TODOS LOS DOMINGOS me escriben, pero no siempre les acepto que vengan a casa. A veces ya tuve buen garche el dia/noche anterior. A veces solo tengo ganas de dormir (ya que siempre escriben tipo mediodia, si escribieran mas tipo 5/6/7...). Y otras (la mayoría) solo quiero tomarme el finde para estar solo y no lidiar con la raza humana después de toda una semana trabajando/estudiando/ensayando/haciendo trámites. En fin, este texto es más que nada para comentarles de las ultima vez que me visitó casa uno, que se dieron circunstancias muy interesantes.
La última vez que vino el millonario, le estaba por decir que no, cuando me dice "tengo un amigo hetero que me tira la goma cada tanto, y le conté de vos y se muere de comernos las pijas a los dos a la vez".
Por supuesto que le dije "VENGANSE YA", y en media hora los tenía a los dos en la puerta. El pibe nuevo (jovencito, no más de 26 años, flaquito, morocho, pelo corto, barbita, velludo, onda nada que ver, vestido con cortos de fútbol y remera random pero cero glamour) no perdió el tiempo y a pocos segundos de entrar ya estaba arrodillado amasándonos las chotas por encima del pantalón. Con mi viejo amigo el gallina ya nos estábamos comiendo la jeta. El otro pibe no aguanto mucho la amasada y nos pelo verga a ambos, comiéndose primero la mía (que ya estaba al re palo, el millo todavía estaba gomoso). Cómo tragaba chota ese pibe! A fondo y decidido, pero sin desesperación. Alternaba un ratito a mi, un ratito a mi amigo, pero se notaba que lo tenia mas entusiasmado el chiche nuevo. A mi pija la chupaba con mas ganas (quizá porque es mas grande). El gallina, que es mas fanatico de mi chota que del club de Nuñez no aguanto mucho y despues de un rato bajo el tambien a comerme la chota. Que bien y con qué ganas me la come! Tanto entusiasmo y tan monopolizada la tenía en su momento que le tuve que decir que no sea amarrete y deje un poco para la visita! Ahi se calmo un poco y volvió a ofrecerle su pija al visitante. Cuando ya estuvimos todos bien al palo (el chupapijas ya se estaba pajeando también), pasamos al cuarto.
El pibe nos siguió mamando la chota. Mi amigo volvía a bajar cada tanto a comermela y chuparmela entre los dos. La gloria total! El visitante nos pide que lo filmemos chupandonos la pija. Parece que la cámara lo calentaba más, porque la chupaba con mas ganas mientras la lente lo capturaba! Yo me entusiasme y le empecé a garchar la garganta. A tal punto que cuando se vino la típica atragantada, cuando se la saca me dice, firme: "PARA, BAJA UN CAMBIO, NO ME ACABES EN LA BOCA". Le aclare que solo lo hago cuando me lo piden, sino me dicen EXPRESAMENTE que lo haga, NO lo hago (a menos no la primera vez, cuando hay confianza, y ya lo hice alguna vez con su consentimiento, y le cabio, ya es otra cosa). Siguió chupandonos las pijas, pero de repente le sonó el teléfono. Se negó a atender un par de veces, pero la tercera fue la vencida. Ahi mi amigo aprovechó para monopolizar nuevamente mi pija. "Hola amor... si, todo bien, estoy con los pibes, EN EL POOL... ahora?.... bueno dale, en un rato llego". Y si, tal como sospechaba, SE TUVO QUE IR. Bien lleno de chota, y con un lindo videito de recuerdo en su celular. Mi viejo colega el millo aprovecho que ahora mi pija era toda suya y me la EXPRIMIÓ por boca o culo a mas no poder (tambien me pego una culeada memorable). Me trago hasta la última gota! Creo que, junto con esa primera vez jugando al bostero y el gallina, es la vez que mejor la pase con el...
El tachero se hizo fan mio. Un poco me cela también, que no nos vemos tanto como el quisiera, que no le doy bola... Pero cuando viene, le hago tragar todas sus palabras (entre otras cosas, je). Me puede estar chupando la pija por una hora tranquilamente sin mosquearse. Pero todavía le cuesta entregar el rosquete, después de esa primera vez que para el no fue tan satisfactoria como para mi. Así que si bien SIEMPRE LO INTENTO, nunca tuve su consentimiento. El me la puso una vez, pero como sobrecalienta demasiado, acabo apenas sus huevos hicieron tope (QUE HERMOSA PIJA QUE TIENE, debo reafirmar). Hoy volvio, despues de un par de semanas. Después de un rato de chape, se dedicó a su faena favorita: chuparme la pija, largo, tendido y bien a fondo. Con un poco de diente aun, pero se lo perdonamos. Estaba el sentado en mi sofá, inclinado de costado hacia mi. Me pare y lo hice mamarme el sentado y yo parado de frente. Cada tanto le agarraba la nuca y le cogia un poco la garganta. Se la banca bastante bien! "Que puto que me pones Martin!", me tira. Y pensé "ahora te voy a poner mas puto". Le pido que salga del sofá. Me pongo en medio de la sala. "Arrodillate". Creo que no entendía bien que quería pero no era (para mi, y para la inmensa mayoría de uds tampoco) nada extravagante. "Arrodillate y chupame la pija, como lo hacen los putos de verdad".
Ahi si, se arrodillo frente a mi y me comió la verga con mas ganas. Pasamos al cuarto. Me siguió chupando la pija, pero esta vez, que ya se había puesto en bolas (en todo el rato en el living estuvo vestido), aproveche para empezar a dedearlo... Se retorcia, y no entendía si era de incomodidad o de placer. Por las dudas le pregunté. "Me encanta! Segui por favor". Bueeeeeno...! En eso que seguí, a ese hoyo claramente le faltaba lubricación. Y con chuparme el dedo no iba a ser suficiente. Así que lo destete, lo di vuelta y lo puse en cuatro al borde de la cama. Sin darle mucho tiempo a reaccionar, le empecé a mandar lengua a ese hoyo. Empezó a gemir con ganas, desaforado. "COGEME MARTIN, POR FAVOR! COGEME!". Diosss como había esperado ese momento! Caze un forro de la mesa de luz (mientras el aprovecho y se metió mi pija en la boca un ratito más, y lo deje hacer porque me la estaba chupando tan bien!), me lo calce, pero no fui de una. Empecé a mandar dedos. Despacito, lento, de a poquito. Tratando de sentir como se la iba bancando y como iba abriendo. Se banco uno, dos, tres...... ya cuando le mande el cuarto, era evidente que estaba dilatadisimo. Le saco los dedos y le digo "ya te bancaste cuatro dedos adentro, a ver si ahora te bancas esto". Y empecé a entrar con la pija. Este tipo me encanta porque TIEMBLA de placer. Cada pedacito de pija que entraba se estremecía como si estuviera por entrar en epilepsia. Fui lo mas lento y suave posible, no quería que haya el más mínimo margen de dolor ni sufrimiento esta vez. Me quedé quieto un buen rato, para que su hoyo se amolde a mi chota. Empecé a moverme MUY despacio, pero al ratito el ya empujaba el orto con decisión. Ahi note que ya la tenia toda adentro, hasta los huevos. "Ah queres murra entonces? Ahora te la bancas putazo!" Y ahí me desate. CON TODO le di.
Lo bueno es que esta vez no solo no había el menor signo de dolor o incomodidad de parte de él, al contrario, EL MISMO MOVÍA EL ORTO para comerse mas y mas mi pija. Gemía a full. Eso me ponía mas a mil a mi. "Si Martin! Cogeme! Rompeme bien el orto! Llename todo! Que puto me pones!". Escuchaba sus gemidos y sus palabras y con más ganas le daba. Un buen raro estuve así, con el en cuatro, agarrandolo firme de sus caderas, taladrando a más no poder. No quería acabar! Quería hacer ese orto casi nuevo, grande, apretado pero bien comilon todo el tiempo del mundo! De repente siento que me esta apretando más que lo normal. "Acabo! Acabo! Acabame por favor que acaboooooo" LE EXPLOTO LA CHOTA, SIN TOCARSE! Y eso me activo el lechazo a mi tambien. Le di unas cuantas estocadas más hasta que yo tambien, revente bien a fondo suyo!
Después del lechazo, siempre una pequeña charla trivial, un "no cuelgues, veamonos pronto!", y huyen, nuevamente al resguardo de su novia uno, y de su esposa e hijos el otro. Y yo, sedadisimo después de echarme tremendos polvazos!